5/29/2022

Sofía hace allioli. El allioli.

 Sofía hace allioli.

Porque si, Sofía hace allioli prácticamente todos los domingos.

Me ha resultado curioso esta semana, que han tenido media semana de vacaciones por eso de ser fiestas en el pueblo, que muchas personas que veían a Sofia le preguntaban por el allioli y que si era verdad que hacía, que querían probarlo.

Eso ha hecho que ella, que lista es más que los ratones coloraos, esté viendo oportunidades de negocio. Ayer ya me decía que igual que venden tarros en el super, que ya que empieza a haber demanda de allioli de Sofía, que habrá que poner precio al suyo.

Si ya lo dicen, que los niños de hoy, nacen enseñados...

Antes, nuestras cavilaciones eran más bien cuantos timbres tocar sin que nos pillaran en la carrera que te podías pegar de una esquina a otra...ahora, hay criaturas que ven ocasiones de ganar perricas por todos lados.

Que digo yo, que cualquier día de estos me está pidiendo también derechos de imagen por usar su nombre en el blog. Me va a tocar ir pensando en cambiar a Mario  solo quiere que gane el Barça ¿? 

Supongo que habrá mucha conversación futbolera hoy...con el Madrid y la catorze (perdón por ponerlo con zeta, pero es que a mi lo de la catorce me suena a nombre de birra). Otros estamos todavía viendo como una vez más nos han engañado con el club de nuestros dolores, porque ser del Castellón es no ganar para disgustos...pero ya termina mayo, el furbol, y esas discusiones de bar de los fines de semana se aparcan unas breves semanas.

Acaban también, para gloria de mi rodilla, las fiestas del pueblo, hasta agosto que llegue Vilafranca y Castellfort.

Es domingo, Sofia hace allioli y yo...me voy a tomar un vermut blanco.



5/15/2022

Sofía hace allioli. Sofía de romería.

Sofía hace allioli.

Es más tarde de lo normal. El contador de pasos ha llegado a los 10 mil pasos prontito hoy.

También ha sonado el despertador, a pesar de ser domingo. Pero teníamos ganas. Ganas de romería , por fin.

Una tradición más. Levantarse antes de las 8 para preparar los pañuelos, el pan, los bocadillos. Todo.

Con la pandemia se paró el mundo y nuestras tradiciones. Esas tradiciones que algunas ya escribí de ellas pero otras las guardé para un día como hoy.

La romería, tiene sentido hasta para mi, que soy atea declarada. Pero tengo mi estampita de mi Quiteria que me regalo mi madre siempre muy cerca. Mi pañuelo rojo, heredado. Mis cintas romeras colgadas del coche... Y cada uno de los miembros de mi manada tiene su pañuelo.

Además, Sofía y yo, llevamos nuestra cinta con un broche que representa a nuestra reina morena. 

Una de las tradiciones más bonitas que me gusta cumplir, aunque cuesta un poco, es hacer sonar la campana de la ermita. Suerte la mía que Sofía ya va siendo un poco más mayor y ya no solo tiro yo de la cadena. Hoy, la hemos hecho sonar por primera vez sin ayuda. Lo logramos!! El año que viene, espero que se una al equipo Mario. Objetivo cumplido.

Hemos ido, después de esperar tanto tiempo. Seguimos cumpliendo nuestras particulares tradiciones.

A esperar que esta tarde pase por debajo de casa, está vez acompañada, nuestra Quiteria, para pedirle salud para los nuestros.

Es domingo, Sofía hace allioli y yo...cerveza fresca. 

5/08/2022

Sofía hace allioli . Sofía marchosa

 Pensaba que hoy no lo haría. Se ha despertado tarde. Normal. Ayer era la primera vez que salia de marcha.

Muchas emociones para ella . Estuvo toda la tarde viendo como hacía grafitis. Ella es muy fan de las pinturas, el lettering y esas cosas. No se separó del mural hasta que estuvo terminado. Disfrutó mucho viendo el proceso, que primero parecía una cosa y terminó siendo algo precioso. Espero, solo espero, que el día de mañana no encuentre una pintada suya poniendo "mamá yo no he sido". Se llevó de regalo varias láminas, preciosas todas ellas.

Disfrutaba a su vez de batallas de gallos, que yo, que nunca había presenciado nada parecido, he de decir que me resultó muy curioso el evento.

Para terminar el día, vino el plato fuerte, lo que llevaba tiempo esperando. El concierto de Arkano. Primera fila y a disfrutar. No es el rap algo que me entusiasme, pero he de reconoce
r que hasta yo lo pasé bien. Sofía tuvo su momento de gloria cuando le acercaron un micrófono para proponer una palabra y que el artista hiciera lo que llaman en la jerga rapera "freestyle". Ya había hecho la noche, aunque le quedaba a conocer a Arkano y hacerse la foto.

Pero mi reflexión hoy, más allá de la crónica lúdico festiva es sobre algo que me llamó mucho la atención. El publico...o su escasez. El personaje en cuestión es famoso, mucho. Supera el millón de seguidores en redes sociales. Ha salido en los talent shows de moda...Llena en Madrid  en conciertos donde la gente pasa rigurosamente por taquilla...y viene a Almassora. Un pueblo de algo más de 25 mil habitantes, entrada gratuita y, sinceramente, una servidora esperaba a más afluencia de público. Ya no solamente local. Aquí ya sabemos que a muchos los sacas de las palmas y el taconeo y, a pesar del comentario de "joer siempre flamenco y camela" pero que nos conocemos, lolailos.

Yo se el esfuerzo que ha supuesto traer todo lo que se montó ayer en Almassora, porque he tenido la suerte de poder vivirlo. Mi eterno agradecimiento a María Luisa y Esther porque desde el minuto uno que tuvieron la idea encima de la mesa, se volcaron por  montar una jornada inolvidable para los que se asomaron a disfrutar, como Sofía, que a sus 10 años, por primera vez, salió de marcha.

Es domingo, Sofía hace allioli y yo, sin que sirva de precedente, me voy a tomar una cerveza en lugar de vermut blanco.

5/07/2022

Sofía no está haciendo allioli.

 Es sábado. No toca allioli. En casa, siendo tantos, los menús los tiene marcados hasta el gato. Es sábado y toca pasta.

He decidido escribir esto para justificar el porque de este blog. Ya tenía uno. Primero fueron las memorias de una exiliada en la montaña. Lo creé en 2008 cuando aterricé en la radio. Escribía mucho, sobre temas de actualidad que atañían a mis montañas. Con la muerte de mi padre, aquello cambió un poco y se volvió más personal, hasta que retomé la actualidad. Más tarde, al cerrar la radio, lo dejé olvidado. 

Un día, en uno de esos arrebatos míos, viendo un debate sobre el estado de la nación (si, yo veo esas cosas) hice un "sondeo" entre mis amistades y decidí retomarlo. Lo reconvertí en memorias de una madre estresada. Ya no tenía sentido el exilio en la montaña, pues había vuelto a casa. Pero el dominio del blog me servía "por circunstancias". Porque por alguna razón decidí en su día llamarlo así...por circunstancias estuve en la montaña y por circunstancias volví a casa y termine siendo una madre de familia numerosa, 3 hijos y un gato sordo. En fin.

Tanto tiempo después, creo que es momento de cerrar esas circunstancias, dejar el archivo ahí, que le sirve a mi memoria perdida para recuperar recuerdos y echar alguna lagrima de vez en cuando. Es momento de crear un lugar donde se quede, cuando mi memoria se pierda del todo, por circunstancias o por lo que sea, cada domingo, cuando escribo que Sofía hace allioli. Se lo debo a ella, que me inspira a enfrentar mis pensamientos con el simple hecho de coger un mortero y picar ajos.

Y esa, es la razón, por la que hoy, nace Sofia hace allioli. Para guardarle a  mis circunstancias bonitas mis pensamientos.

 Supongo, solo supongo que Sofía estará haciendo allioli. Está en el pueblo.

De vez en cuando, yo necesito un respiro.
Necesito estar en soledad. Hablar conmigo, preguntarme cosas que solo yo se responderme y, a veces, solo a veces, no quiero responder.
Llevo muchos días pensando sobre salud mental. A raíz de varias experiencias cercanas y de noticias leídas en prensa.

¿Por qué nos cuesta tanto hablar sobre esos temas?
¿Nos censuramos a nosotros mismos a la hora de abordar esos temas?
Son preguntas que me llevo haciendo hace días.
En periodismo siempre nos han censurado dar noticias sobre suicidios por miedo al efecto imitación. Sin embargo, no existe esa censura en violencia de género, vicaria.. Ahora parece que empieza a levantarse el veto.
Por qué se estigmatitza a quienes sufren un problema mental?
¿Acaso no estamos todos un poco locos?
Es domingo, supongo que Sofía hará allioli y yo, me voy a tomar um vermut blanco, de los que hacen en mi pueblo