6/26/2022

Sofía hace allioli? Vida rural

 Es domingo. Sofía debería estar haciendo allioli. Pero está en la piscina de Castellfort. No tengo claro si hará allioli hoy.  Tampoco estoy muy segura de cómo va a quedar esta entrada, ya que con el móvil no es lo mismo.

Llegamos al pueblo el jueves por la tarde. El festivo del viernes nos ha permitido disfrutar de unos días de tranquilidad. De dormir tapados. De ponerse la chaqueta a media tarde. De pasear por la montaña. 

De cosas que a veces no apreciamos... Y que no tienen precio. 

Hemos aprovechado para ir a varios lugares y en todos, cuando alguna persona más o menos mayor, su memoria no alcanzaba a reconocernos, siempre decían lo mismo "que bien que vengan y abran casas, pero estaría mejor que fuera para todo el año".

El eterno problema del interior. De los pueblos. Que no se da con la tecla para que se quede la gente joven y los colegios y calles se llenen de niños... Y alegría.

Ojalá. Ojalá funcione alguno de lis tres millones de ideas y planes contra la despoblación... Ojalá. Porque vivir, se vive muy bien.

Una vez, yo tuve trabajo aquí y fui muy feliz.

Es domingo, Sofía todavía no hace allioli, lo siento pero no se poner una foto a esto... Ah, y me voy a tomar un vermut blanco. 

6/19/2022

Sofía hace allioli. La vida, sin más.

 Es domingo, muy caluroso. A pesar de lo que pensaba hace un ratito, Sofía está haciendo allioli. Ha  salido de la piscina para hacer lo que toca.

No tenía ni idea de que escribir, porque me veía otra vez dándole al mortero, asi que no tenía muy claro de que escribir. Solo pensaba estos días y recordaba a un buen amigo, casi un padre , que nos dejó esta semana. Así, que con vuestro permiso, mi Sofía hace allioli de esta semana, lo escribo, pensando en Manolo.

Manolo, y su inseparable Emma, era un batallador de la vida. Y creo que hoy sería de los que, a estas horas, estaría con su vino blanco fresco en el bar, conversando sobre actualidad y renegando de muchas de las cosas que pasan.

Sabéis, a veces se enfadaba tanto, que hasta discutía con él mismo,  pero era chulo tener conversaciones sobre la vida con él.

Creo, que si hoy estuviera compartiendo mi vermut con su vino blanco estaríamos hablando de las elecciones andaluzas, muy por encima. Porque lo que de verdad nos jode a todos, es el bolsillo. 

Que me perdonen los andaluces, pero a nosotros, hoy, aunque miremos de reojo si el Juanma va a necesitar a los de verde o si el de Pedro se pega más batacazo que la Susana, nos importa menos que lo que nos cuesta el pollo (ay señor, que yo con esto de trabajar llevaba tiempo sin ir a la compra y ayer casi me caigo en carrefur).

El pollo, que era de lo más barato que tenías, parece que las alas le sirven más que a las compresas. Que burrada. Se me ocurrió mirar el pulpo, porque durante nuestro almuerzo de sábado, en la mesa de al lado, un tipet estaba dando cuenta de un pulpo que pa que las cosas...a 52 €...de locos...al final terminaremos, como decía mi madre "avuí, pa dinar, cançons" (para comer, canciones).

Gracias doy a que teletrabajo y mi coche, que tiene el vicio de comerse la gasolina como si no hubiera un mañana, lleva tiempo sin moverse. Hoy lo he cambiado de sitio no vaya a ser que le pongan la pegatina de abandonado.

Mi churri ya mueve el coche por 3, con tener que ir a trabajar a Onda todos los días...y cuando vi a mi amigo Vicente poner la foto esta semana de lo que le había costado repostar el coche...casi me da un patrás. 

He escuchado de pasada que si los transportistas quieren o van a volver a convocar una huelga para no se que día.

Joé. Pues ya están tardando...si un coche está repostando a 2.18 y ya en las noticias, que hasta Sofía lo dice, están contando que las previsiones son que llegue a los 3 euritos en pocos meses...a que esperan.

Pero yo es que voy más allá. Sumando todos los factores. Sube el pollo, la leche, el pan, la luz, el gas, la gasolina, las galletas de los niños, los calcetines, las bragas, el pienso de mi gato sordo, el arroz, los tomates, la sandia...no sigo que me fatigo...solo hay una cosa que no sube, los sueldos. ¿Somos gilipollas los españolitos, que no nos tiramos a la calle a protestar? ¿Nos conformamos con cabrearnos en el facebook y en el bar?

Es domingo, Sofia hace allioli, yo me voy a tomar un vermut blanco...y brindo contigo Manuel.

6/12/2022

Sofía hace allioli. Libros y verano.

 Sofía no está haciendo allioli. Está medio en huelga. Dice, que lo haga yo hoy. 

La puedo llegar a entender. Hace muchísimo calor hoy. Tanto, que no hemos ido a la tornà de Santa Quiteria. 

Ayer medio inauguramos el verano. Hicimos el montaje provisional de la piscina. No está en su ubicación definitiva, pero para salvar los primeros guantazos de calor, sirve. 

Que se lo digan a Sofia. Que esa es la razón por la que lleva rato diciéndome que hoy, el allioli que lo haga yo...y ahora que ¿? 

Después de los encargos que ha recibido hoy...


Vaya, que después de decidir que con este calor, mejor no íbamos de romería, hemos ido a pegar un bocadito y luego, a ver a amigos a la Plaça de les Aules, al Salón del comic y el Libro infantil y juvenil.

Es una pasada ver como niños casi en pañales ya se van interesando por sujetar libros. Había ambientillo. Las casetas, pues algunas pasando del publico que se arrimaba y otras, tratando de cautivar a los jóvenes lectores con libros escogidos magistralmente, la verdad. 

Mis niños tenían sus elecciones. Mario nada más llegar le ha echado el ojo a un tigre...y el tigre se lo ha regalado Amelia. Y Sofía, que sigue en la piscina y creo que me va a tocar ir al rescate del allioli, se ha hecho con el Pi day.

Entre medias...Había cuentacuentos y actividades para los asistentes. Mario, se hizo muy amigo de Miguel Alayrach. Siempre que hay algún sarao donde le digo que va a estar Miguel, se le pasa la mala gana...aunque lleva mal lo de esperar, eso si. 

Como niños, hemos escuchado ¿Y si nuestro hermanito Laconcito no es un cerdito? Nos ha gustado mucho. Y sobre todo, hay que reconocer el esfuerzo de que sea un cuento con pictogramas para que ningún niño se quede sin leerlo.

...Y así, ha pasado nuestro domingo...

...Porque es domingo, Sofía no está por la labor de hacer allioli...así que yo...me voy a pelar ajos.

6/05/2022

Sofía hace allioli. Recuerdos y sueños.

 Sofía debe estar haciendo allioli.

Lo supongo, porque está en el pueblo y no conmigo. 

Cuando me toca el tratamiento de la migraña, esos pinchazos en la cabeza, estoy unos días fastidiada y acostumbran a dejarme espacio para recuperarme en silencio. Tengo la suerte de tener una manada comprensiva con estos achaques. 

No ha sido un fin de semana idílico. Del baño al sofá, del sofá a la cocina...vuelta al sofá y a la cama. De hecho, estaba a punto de pedir disculpas por no actualizar el blog.

Esta mañana he abierto un ojo. He visto que no llevaba el reloj y he tirado de móvil para ver que hora era. Me he dado cuenta que había un wasap..."Hola, estas despierta?" era mi Ainhoa, que salía de guardia. He abierto el otro ojo y le he contestado ¿Café? Total que nos hemos ido a almorzar un buen bocata las dos.

Me ha sabido a gloria, no comía algo de verdad desde el jueves...y la compañía. Con ella soy yo siempre, sin maquillaje. Pero a lo que quería contar.

Ha venido la parte agridulce con el café. Se ha acercado alguien con quien crecí y me ha dicho que su madre les había dejado esta semana. Me ha dejado tocada.

He estado recordando mi niñez toda la mañana. Aquella niña que jugaba en cualquier rincón de las calles, que se escapaba siempre que podía en verano con la bicicleta...que pensará aquella niña, con un nombre diferente al que uso hoy de mi? Me lo he preguntado tantas veces...

No os pasa a vosotros? Yo tenía sueños. Muchos...Recuerdo que en verano, cuando necesitaba estar sola, me escondía en las escaleras de la casa de la playa y me inventaba canciones. Me gustaba cantar, bajito. Que nadie me escuchara. Pero me gustaba cantar. Me inventaba letras con mis sueños. 

Escribía redacciones, porque solo eran redacciones, con historias fantásticas en folios que terminaba quemando en la barbacoa que luego solo eran ceniza que servía para hacer empastres que provocaban las regañinas de mi madre.

Pero soñaba. Soñaba mucho despierta. ¿Dónde quedaron los sueños, de esa niña que me mira con esos ojitos? Le estaré defraudando, o estará contenta de ser quien es hoy...

Es domingo, Sofia habrá hecho allioli...y yo...debería tomar mi vermut blanco.